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Guru y discípulos

En el deseo que anida en nuestro interior por descubrir y experimentar algo que podamos considerar excepcional, solemos entregarnos, ser seguidores ciegos y aceptar enseñanzas que no comprobamos si son veraces o mero fruto de querer ver las cosas como nos gustaría que fuesen. Siempre es conveniente mantener una mente con capacidad de discernir.

 Como bien decía el poeta inglés William Wordsworth:"Lo que necesitamos, no es la voluntad de creer, sino el deseo de descubrir".

 En una ocasión, un guru, se dirigió al Ganges en Haridwar en el Norte de la India a fin de tomar un baño purificador, y al que iban acompañando numerosos discípulos. Este maestro, como era costumbre en él, llevaba una vasija que solía utilizar para trasnportar agua del río sagrado y situarla en el altar en su ashram.

 Al llegar a orillas del río, se sentó a meditar unos instantes y sus seguidores quedaron a cierta distancia respetando el silencio y quietud de su maestro.

 Al salir de su estado meditativo, el guru excavó un hoyo, introdujo la vasija y apiló un montón de arena encima como señal. Se levantó y se sumergió en el Ganges para tomar su baño purificador.

 Sus discípulos, sin saber la causa del montón de arena y suponiendo que formaba parte de un ritual, hicieron montones similares a lo largo del banco de arena.

 Cuando el maestro terminó su baño, se dirigió a buscar la vasija y en lugar de encontrar un montón de arena, descubrió que toda la orilla estaba cubierta de montones parecidos. Atónito, se dirigió a sus discípulos y les preguntó cual era la razón de todo aquello.

 Al saber que únicamente habían tratado de imitarle, el guru reprendió a sus seguidores al ser tan necios de llevar a cabo acciones ciegamente y sin conocer el propósito de las mismas.

 Aquí, no sería preciso añadir que encontrar la vasija no fué tarea sencilla.


Bhagavad Gita

Bhagavad Gita

El/la Bhagavad Gita, el Canto (Gita) del Señor (Bhagavan), es la escritura y poema hindú más famoso y reconocido. Para la mayoría de los hindúes es su principal texto devocional y en estos últimos tiempos, existe en todo el mundo gran interés en sus enseñanzas filosóficas y religiosas.

Diálogo entre Krishna y Arjuna

 El Gita está compuesto en verso y en sánscrito, en el que se recoge un hermoso diálogo entre Krishna - a quien se le considera Dios - y el guerrero Arjuna, a quien Krishna instruye a lo largo de dieciocho capítulos con su doctrina moral y religiosa.

Mahabharata

 El Gita aparece en el libro sexto del gran poema épico, el Mahabharata, considerado el más extenso en todo el mundo. El Mahabharata es una vasta recopilación de leyendas, mitología reliigiosa, y enseñanzas filosóficas, teológicas y éticas.

Kauravas y Pandavas

 El tema central es la disputa entre dos ramas de la misma familia, Kauravas y Pandavas para restaurar la soberanía. Yudhisthira, el mayor de los cinco hermanos Pandavas, había sido nombrado por su tío, el rey ciego Dhritarasthra, como su sucesor, pero los celos de su propio hijo Duryodhana,  hizo que éste retase a Yudhisthira a jugar a los dados todas sus posesiones. Yudhisthira fué derrotado y se vió obligado a exilarse con sus hermanos, los Pandavas. Al retornar del exilio reclamando parte del reino como había sido acordado y permaneciendo un año más de incógnito, se vieron forzados a luchar para recuperar su reino.

Dharma o deber

 En el épico, Krishna aparece para ayudar a los Pandavas y actúa como cochero de Arjuna, -quien pertenece a la casta de los kshatriyas o guerreros-. El diálogo que se establece a lo largo del texto, se abre en el primer capítulo  en el campo de batalla de Kurushetra.

Este lugar se considera como el símbolo  del campo del deber (Dharma), y la historia avanza en establecer lo que es correcto o incorrecto, acción e inacción, "humano, eternidad y Dios".

Los dos ejércitos, Kauravas y Pandavas se sitúan dispuestos a la lucha. Cuando Arjuna observa a los dos bandos contendientes en los que muchos de sus parientes y amigos están a punto de enfrentarse, se siente sobrecogido  por el horror de una guerra fratricida y se niega a luchar.

 

Enseñanza de Krishna

 Krishna le responde en sus enseñanzas con cuatro razones importantes para que lleve a cabo su dharma o deber como guerrero, de las cuales, la principal es que el Ser o la esencia es inmortal y continúa indicándole, qué es la acción en la inacción, los distintos tipos de Yoga y como alcanzar la inmortalidad.

Necesidad de interpretar el texto por distintos maestros y eruditos.

 El Gita no es siempre fácil de entender, Hay referencias a nombres y lugares y pasajes díficiles de explicar. Por otro lado, el contenido del Bhagavad Gita y sus versos, son interpretados con muy diversos comentarios por diferentes eruditos, maestros, filósofos y estudiosos.

Personajes del Baghavad Gita

 Hay personajes centrales en el Gita que sería prolijo situar y explicar con detalle para una buena comprensión del texto. Lo único que se me ocurre, es recomendar el participar en uno de nuestros cursos para su entendimiento.

Personajes :

Krishna y Arjuna, sobre quienes se apoya ell diálogo. Krishna representa y simboliza a la manifestación o Encarnación de Dios, Maestro, Guru. Arjuna, el ser individual que busca respuestas y conocimiento.

Vyasa, a quien se le asigna la autoría del Bhagavad Gita.

Dhritarastrha - Rey de los Kauravas, que es ciego.

Pandu, hermano de Dhritarasthra y padre de los Pandavas.

Los Pandavas, son cinco hermanos, de los cuales Arjuna es el tercero.

Yudhistira, primogénito de los Pandavas

Duryodhana, primogénito de los Kauravas, ambicioso con gran sed de poder.

Bhisma, maestro de ambos clanes.

Drona, brahmin de gran conocimiento y que se convierte en el maestro dearmas.

Draupadi, la esposa de los cinco pandavas.

Sanjaya, tiene el poder de saber lo que sucede en el campo de batalla    entre ambos bandos y lo va narrando al rey ciego Drhitarastrha.

 


La impaciencia

Historia de la impaciencia

Verdaderamente la impaciencia nos consume. Hay en nosotros una necesidad imperiosa de que las cosas se den en nuestra vida de forma inmediata; sin embargo, la paciencia es una virtud que nos llega con un firme propósito al éxito

 Un hombre estaba dispuesto a recibir enseñanzas de naturaleza espiritual. Para ello, acudió a un bosque donde vivía un afamado maestro al que encontró sentado realizando sus prácticas de meditación. El hombre, aguardó a que el maestro terminase sus prácticas, y, después de presentarse, pidió al maestro que le transmitiese sus enseñanzas.

- Permanece conmigo unos días y te iré mostrando cual es el camino hacia la liberación de la mente -.

- No, no puedo esperar tanto tiempo - dijo el hombre -. Quiero recibir tus instrucciones enseguida.

- Esta no es la actitud correcta - dijo el maestro - pero conozco un gran yogui que quizá te pueda enseñar al momento. Vive a unos cuantos kilómetros de aquí, en un bosque de mangos. Visítale en mi nombre, pero te hago un ruego: Te entrego esta cajita para que se la entregues en cuanto lo veas.

-Así lo haré, dijo el hombre -.¿Pero, estás seguro que me dará sus enseñanzas en el acto?

- Prueba a ver -.

El hombre partió precipitadamente y comenzó a caminar con paso veloz, llevando la cajita en la mano. De repente, escuchó un ruidito en la caja y sintió curiosidad por saber de que se trataba. abrió la cajita y un ratoncillo que había dentro saltó fuera de la misma y salió corriendo. Fué imposible seguirlo. El hombre cerró la cajita y prosiguió caminando.

Sentado en estado de meditación profunda se encontraba el yogui cuando llegó el hombre al bosque donde el sabio vivía.

-Perdone que le moleste swamiji. Tengo una cajita que me ha sido entregada por el maestro que vive en el bosque de banianos y que me ha dicho que os la entregara. El motivo de mi visita es que quiero recibir las más sublimes enseñanzas espirituales enseguida. Quiero que me muestres la vía de la liberación de la mente.

-Dame antes la cajita - dijo el yogui

Con mucha atención, el maestro abrió la cajita y la encontró vacía.

¿Había algo dentro?, preguntó.

-Sí, repuso el hombre vacilante-. Un ratoncito.

Y el maestro con gran firmeza le dijo:

-Si no eres capaz de cuidar un ratoncito, ¿cómo vas a tener la paciencia y madurez suficiente para recibir enseñanzas profundas? Puedes irte y no olvidies nunca que la impaciencia es uno de los grandes obstáculos para el aprendizaje espiritual.