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Yoga, lesiones y contraindicaciones
Nuestro exquisito cuidado en la práctica y enseñanza
A lo largo de muchos años de práctica y enseñanza, siempre ha sido nuestra idea el mantener un exquisito cuidado con las posturas de yoga, su correcto posicionamiento, el entendendimiento de la anatomía y las limitaciones con las que se deben trabajar.Nunca causar daño.
Nuestros Cursos de Formación están diseñados para impartir clases con rigor dando a entender el esmerado cuidado con el que debe trabajarse con los mecanismos propios del ser humano y de las particularidades que cada alumno de yoga requiere.
El New York Times y las lesiones
Hace poco, ha salido publicado en el New York Times un artículo donde se hace mención a aspectos relacionados con el yoga y lesiones que se producen, y desde luego, si el profesor/a exige en exceso, - como he visto en EE.UU.- y como cada vez se extiende más, pensando que cuanta mayor sea la exigencia en las posturas, más beneficiosa es la prácticaa de sus alumnos, - llevándolos al límite, no cabe duda, que tarde o temprano se van a producir daños, cualesquiera que estos sean.
Evidentemente, existen este tipo de profesor@s que piensan que cuanto más poderosos sean sus ajustes, mejor será para el alumn@. Nada más engañoso, ya que el cuerpo se encarga de "hablar" a su debido tiempo. Posiblemente, es de éstos acerca de quien escribe Mr. Broad.
Tengo que decir por otro lado, que alguno de los ejemplos que el autor da en el artículo, merecen ser criticados, me atrevería a indicar que con dureza, ya que hay que saber discernir. La responsabilidad no se le puede achacar al yoga sino a quien lo practica y sobre todo como lo practica.
Un poco de sentido común, por favor, Mr. Broad.
Acaso se puede uno apoyar en decir que un profesor de yoga que haciendo el perro boca abajo - una especie de V invertida - rompió el tendón de Aquiles, al realizar la postura de una manera extremadamente forzada y de manera continuada.
¿Es culpa del yoga, o del practicante que no sabe entender cuales son las limitaciones? ¿Cuando uno conduce temerariamente, acaso no está expuesto a tener un accidente? El alimento es imprescindible para la vida y sin embargo cuando no se cuida y se come en exceso, desordenadamente y de forma inadecuada, se manifiestan infinidad de patologías: problemas cardiovasculares, renales, artritis, hipertensión, obesidad y tantos otros. ¿Es culpable el alimento o quien no sabe como regular su dieta y hacerla sana? Vamos, vamos, Mr. William Broad, más rigor y seriedad-
¿Cómo es posible utilizar este otro ejemplo, en el que un estudiante, después de un año de práctica de yoga, decidió intensificar la misma permaneciendo durante horas al día de rodillas sentado sobre los talones - postura conocida como vajrasana - cantando para lograr la paz en el mundo? ¿Es el yoga culpable o quien no tiene capacidad para distinguir llevando a cabo posturas que nadie en su sano juicio realiza de esa manera?
Por descontado que existen profesores incompetentes y alumnos que extreman inadecuadamente sus prácticas.También hay periodistas, escritores . ........
Busca buenos profesor@s para tu práctica segura
Lo primero y más importante es no dañar. Cuando se practican asanas tales como sarvangasana - sobre los hombros -, sirshasana - sobre la cabeza -, matsyasana - el pez - y otras muchas, es de suma importancia no situar el peso en las cervicales ya que no es su función sostener el cuerpo y sí únicamente dos o tres kilos - el peso del cráneo - y no ejercer presión en esa zona.
Normalmente, el cuello puede extenderse - hacia atrás - unos 75 grados; hacia delante unos 40 grados y lateralmente alrededor de 45 grados y puede rotar sobre su eje unos 50 grados. Cuando se llevan a cabo posturas que ejercen una excesiva presión en esas zonas puede dar lugar a complicaciones en los discos, dañar algún nervio o crear problemas en arterias por medio de una vasoconstricción, puesto que es una zona vascularizada. Cualquier presión y movimiento extremo del cuello debe ser evitado completamente y nunca deben exceder su tolerancia fisiológica.
La práctica extrema, no reconocer las limitaciones, realizar las asanas con un ego desmesurado y sentirse obsesionado/a por alcanzar "gestas "extraordinarias", acabarán ocasionando problemas.
Es importante dejarse guiar y ser enseñado-a por profesor@s competentes. Lo que se requiere es una buena formación. de lo que desafortunadamente se carece y evitar riesgos innecesarios. No se puede culpar al yoga de la imprudencia y el desconocimiento con que se practica y también se enseña.
Fòrmate adecuadamente como profes@r y entiende las condiciones del alumn@
A los enseñantes de yoga, les sugeriría que se informasen previamente cuales son las condiciones de sus alumnos para poder actuar más consecuentemente: Cuales son sus condiciones físicas, su estado mental - ansiedad, depresión, fobias, estrés, alteración de cualquier índole, cual es su situación médica ( si la hubiera), hipertensión, problemas cardiovasculares, o cualesquiera otros, lesiones....... Todo ello, nos daría pistas para saber que hacer con mayor seguridad evitando realizar asanas no convenientes para alumnos que por su circunstancia sean desaconsejadas.
El Yoga produce extraordinarios beneficios psicofísicos
La práctica de yoga produce calma, desarrolla la atencióin y concentración, dota de energía, fortaleza y flexibilidad. El yoga equilibra la presión saguínea, combate el estreñimiento, mejora la circulación sanguínea, regula los procesos digestivos, genera una serie de sustancias químicas que actuan como antidepresivos y mejora las relaciones sexuales.
Reitero que se requiere una buena formación - en nuestros cursos - enfatizamos la seguridad en los ajustes y la evitación de posturas que no sean las adecuadas para el practicante - y seleccionar a profesor@s con buena preparación a fin de que la práctica sea segura y satisfactoria.
¿Por qué 40 millones de americanos practican yoga, y usted mismo entre ellos Mr. Broad. Alguna razón habrá ¿no?
Sólo en los Estados Unidos hay alrededor de unos 40 millones de practicantes de yoga. El número por si mismo, resalta la importancia y valor que se le da al Yoga.
Ya en la foto,da muestras que miles de personas en reunen en Central Park en Nueva York para practicar yoga.
El Yoga, no puede ser culpable de quien no sabe enseñarlo o practicarlo en condiciones.
Buena preparación, sentido común, práctica, aceptación de las limitaciones y progreso gradual. Estos son algunos de los ingredientes para un yoga favorable y beneficioso.
Mente crítica, maestros y aprendizaje
Aprendiendo a vivir
Las enseñanzas se generan en todas las culturas y son irradiadas en todas las direcciones para que aquellas personas sedientas del saber, adquieran al menos información ya que el conocimiento supone niveles y estados posiblemente diferentes.
La vida, es una escuela que permite el aprendizaje, a veces notablemente doloroso y en ocasiones dichoso. Existe en todos los seres humanos un ansia de cultivarse y de reconocer a aquellos/as, que pueden enriquecer nuestra existencia. Aunque sólo sea por esto, debemos mostrarle nuestro agradecimiento, desde los más cercanos hasta los más desconocidos.
Conociendo nuestra mente
Si uno pasa por altibajos en lo cotidiano donde los pensamientos y emociones aparecen a raudales, me viene a la mente lo que solía decir un reconocido maestro tibetano en una de sus respuestas favoritas a sus alumnos de meditación, cuando le preguntan como controlar esos estados mentales:
"No podéis detener las olas, pero podéis aprender a surfear. Si uno se pelea con las olas será golpeado continuamente y si por otro lado aprendemos a movernos con ellas, será completamente distinto. Las olas son las mismas, pero la experiencia es diferente".
Suami Sivananda, enseñaba que la mente es un ladrón que nos roba la calma y debe hacerse el esfuerzo en convertirla el mejor de los amigos. Asimismo, comentaba que uno puede comprar colchones pero no sueño, medicamentos pero no salud, libros pero no sabiduría.
La paz no puede comprarse, pero sí aprender a conquistar lo que causa y origina el desasosiego, la inquietud y la ignorancia. La propia mente.
Maestros interesantes
Baba Hari Dass
Estando con Baba Hari Dass con el que hace ya algún tiempo coincidì En EE.UU. y, quien es un mouni yogui desde el año 1952, es decir, que no pronuncia ni una sola palabra y sólo se expresa escribiendo en una pequeña pizarra, sin emitir palabra alguna, indica que el silencio habla, dando a entender una búsqueda interior.
Neem Karoli Baba
Un personaje curioso ha sido sin duda Neem Karoli Baba a quien Ram Dass autor de "Aquí y Ahora" y "Miracle of Love.Stories about Neem Karoli Baba" dió a conocer hacia finales de los años sesenta, y muchos fueron los seguidores sobre todo americanos que sintieron la curiosidad de conocerle. Reconocido como Maharaji, hombre con un gran sentido del humor, le encantaba bromear y hacía sentir a nivel individual que a cada quien daba como una instrucción personal.
Ram Dass
Traigo a colación todo esto ya que Ram Dass cuyo nombre es Richard Alpert, fué profesor en la Universidad de Harvard de la cual fué expulsado al hacer experimentar con el famoso LSD, acompañado de Timothy Leary a sus alumnos y que de alguna manera tuvo también su influencia Aldous Huxley.
Ram Dass sintió la enorme influencia de la India, el yoga y la meditación y fué también Baba Hari Dass, quien era discípulo de Neem Karoli Baba, de quien aprendió sobre la filosofía india. Es curioso, como también mantuvo contacto con otro personaje famoso y contradictorio, Meher Baba (1894-1969) quien curiosamente también mantuvo mouna o silencio desde el año 1925 hasta su muerte, haciéndose entender a través de gestos o la escritura.
Me resulta interresante hablaros de estos personajes por su influencia en distintos buscadores y el sentirme de alguna manera privilegiado por conocer alguno de ellos o a sus discípulos.
Ser buscadores críticos
Se puede observar la variedad de personalidades y maneras de entender la vida y lidiar con las situaciones. Vemos que la individualidad es un componente esencial para interpretar nuestra pasión por la vida y estos personajes son indicadores que muestran la multiciplicidad de ideas y que no necesariamente tenemos que participar de sus posiciones y enseñanzas.
En el Ashram de Neem Karoli - Rishikesh
Amplitud de miras
Nadie debe convertirse en seguidor ciego ni dejarse deslumbrar por aquellas figuras que puedan representar un credo o se les confiera autoridad. La obligación primera de un buscador, es saber discernir, cuestionar y ser crítico en sus en sus argumentos.
Buen ejemplo, cercano por otra parte, es sin duda la amplitud de miras y el acercamiento ecléctico y crítico a diferentes áreas del conocimiento con la que Wes se aproxima, y aquí podemos verle participando con un grupo de reconocidos científicos sobre temas tan interesantes como Ciencia, Conciencia y Espiritualidad.
Está bien que la mente sea una especie de microscopio de muchísimos aumentos que nos sirva para indagar.
Monjes y actitud liberadora
En una ocasión, dos monjes caminaban por el bosque. Al llegar a orillas de un río, se encontraron con una hermosa joven vestida con ropa de seda, incapaz de cruzar el río por temor a arruinar su fina y cara vestimenta. Uno de los monjes se ofreció para llevarla sobre sus espaldas, así que la muchacha aceptó su ayuda y cruzaron el río; al llegar a la otra orilla, el monje dejó a la joven sobre la arena, quien agradeció de corazón la ayuda prestada.
Los dos monjes prosiguieron su camino y el compañero que había observado con todo detenimiento cuando el monje transportaba a la muchacha, no dejaba de pensar en las reglas que les prohibía tocar a las mujeres. Ese otro monje, estaba horrorizado que su hermano de la misma orden hubiese roto esa estricta regla y sin poder contenerse más le dijo:
¿Cómo has podido hacer eso? "Hacer qué?, preguntó el otro monje."¿Cómo has podido tocar a esa mujer? ¡Ah, esa mujer! Yo la dejé a la otra orilla del río después de cruzarlo. ¿Por qué mi querido hermano la llevas tu todavía sobre tu espalda y tu mente?
Esas preocupaciones, negatividades que se revuelven en nuestros estados mentales, ese aferramiento al pasado, le resta claridad, brillantez y alegría al presente.
Todos esos maestros de una manera u otra, dentro de la variedad de sus caracteres, contradiciones y maneras de vivir, pueden aportar sabiduría a los alumnos de la vida, que todos nosotros somos, siempre y cuando actuemos con inteligencia.
Pequeños detalles
Algunos detalles
Me encanta enseñar y compartir pequeños detalles con los estudiantes de Yoga Center.
Ayudas
La simple idea de enseñarles a usar pequeñas ayudas que el cuerpo nos proporciona para proteger y prevenir, me inspiran para seguir aprendiendo y ponerme al día de las últimas investigaciones sobre como tratar el cuerpo.
Hilos mentales
Hace unos días un profesor me agradeció la información que había compartido con el para mejorar su forma de enseñar a sus alumnos, le dije, "ponle un par de hilos mentales a tus alumnos, uno en el esternón y otro en la parte alta de la cabeza, para que puedan mantener el tronco erguido y trabajar desde ahí sus ejercicios", efectivamente a los dos días lo volví a ver y me dijo que solo con haber usado los hilos sus alumnos encontraron que su clase había sido mas difícil aun cuando los ejercicios eran mismos que los de días anteriores.
A veces los pequeños detalles son grandes ayudas. Gauri
Parábola
Mi buen amigo, el escritor, poeta, ensayista y uno de los grandes expertos de la Kábala, Mario Satz, en una de sus hermosas parábolas de los pájaros cantores - que quiero compartir -, revela la sabiduría que como símbolo, los trinos, gorjeos y su singular cantar, encienden el corazón del hombre:
Hubo una vez en la India un rey que tenía tres hijos, intrépidos y arrogantes los mayores y tranquilo y cariñoso el menor. Celosos del pequeño, envidiosos de su gracia, los mayores decidieron eliminar al más joven, a quien todos llamaban Kokila, cuclillo, por su bella y suave voz.
Como el padre descubriera lo que maquinaban los grandes contra el menor, éstos se rebelaron y los expulsaron del reino, quedándose con el trono, las tierras, los ríos y los bosques.
Compasivo, Kokila acompañó a sus progenitores en la larga marcha hacia ninguna parte, consolándoles con una melodía tan tierna, que quienes lo oían le apodaron "el que encanta el corazón". No había tristeza que no les disipara ni esfuerzo que no hiciera por mitigar su dolor. Incluso mendigaba arroz y frutas para ellos.
Los años trajeron arrugas y se llevaron vientos. El exilio fue un trayecto de pies inquietos y suspiros intermitentes. El tiempo, que todo lo hiere, lastimó de muerte a los padres de Kokila, que expiraron con una diferencia de horas entre sus brazos. Entonces aquel de cuyo cantar decían que fascinaba al corazón, se abrió la cabeza con una espada y los enterró en su propio cerebro. El anciano rey y la reina se volvieron minúsculos como ocelos de mariposa y vivieron en el recuerdo de su hijo todos los días de su vida, haciendo aletear su memoria por jardines interminables y valles secretos.
Kokila nunca dejó de cantar, asumiendo a veces forma de un pájaro que dejaba sus huevos en los nidos ajenos y a veces el aspecto de un filósofo errante.
Al cabo de muchas décadas, sus pasos lo llevaron de regreso al sitio de su nacimiento, donde constató que sus hermanos se habían peleado entre sí y el reino se había desgarrado en dos mitades irreconciliables. Sus ojos, a través de los cuales también veían sus padres, comprobaron con pesar que dividir por celos multiplica las dificultades así como sumar por amor simplifica nuestros actos, y entonces, tras cantar con dulzura un trino desconocido, se alejó de allí diciendo:
"Reclamar más de lo que nos pertenece es disminuir lo que ya tenemos".
Historia: Vacía tu taza
Las historias contienen enseñanzas de extraordinario valor, nos pueden hacer reflexionar y llegar a conclusiones que pueden ser de gran ayuda en nuestra vida. Me decido a contaros esta historia que espero os agrade:
Un hombre dedicó años de su vida a la lectura de libros sobre el Yoga y su filosofía. En una ocasión, le hablaron de un gran Maestro y fué a conocerlo con el fin de obtener instrucciones. El guru, le invitó a sentarse a su lado y el hombre comenzó a contarle al maestro todo lo que había leído y comprendido de sus lecturas, comentando que el Yoga es esto, el yoga es aquello y así sucesivamente durante largo tiempo, emitiendo opiniones y juicios de valor.
Después de escucharle, el maestro sugirió que tomasen una taza de té. El maestro comenzó a servir el té en la taza de este nuevo discípulo. Llenó la taza totalmente y continuó sirviendo más té, el cual se iba desparramando por la mesa y por el suelo. En un momento dado, el discípulo no pudo contenerse y dijo:" Basta!, la taza ya está más que llena y es imposible que quepa más té!
El maestro se detuvo y dejó de echar té en la taza y pausadamente dijo: "Al igual que esta taza, tu mente está llena de ideas preconcebidas y de opiniones. ¿Cómo es posible que aprendas algo a no ser que vacíes tu taza?"
Muchos practicantes de yoga han leído y escuchado tantas teorías que cuando se acercan para aprender y profundizar, es imposible que nada penetre en su mente ya que su "taza" está abarrotada generalmente de nociones equivocadas.
El que uno se acerque con una taza o mente vacía, no significa no utilizar la inteligencia y ser un seguidor ciego, sino mantener una mente abierta y receptiva, manteniendo cualquier enjuiciamiento, al menos hasta que uno haya experimentado la práctica y enseñanza durante un tiempo.
Shunryu Suzuki Roshi, gran maestro Zen, solía decir, "En la mente de principiante existen muchas posibilidades; en la del experto, muy pocas."
La mente de principiante es amplia y está abierta, teniendo sed de conocimiento, una taza vacía. Así pues, si hay amplitud de miras y estamos libres de idealizaciones, la mente se hace inquisitiva, receptiva, dispuesta al aprendizaje con discernimiento.
Enseñanza Zen
A veces no sabemos adonde vamos
A fin de aprender, es importante ser humildes y darnos cuenta, que en realidad es poco lo que sabemos y mucho lo que desconocemos. Hay una hermosa historia contada por Seung Sahn,(1927-2004) maestro zen coreano, precursor de la enseñanza "Don´t know mind" "(No sé), que recrea este aspecto:
Cuenta la historia de un rabino en Rusia, que hacia principios del siglo pasado, iba caminando por la plaza principal de un pueblecito, dirigièndose a realizar sus oraciones diarias, y se encontró con el jefe de la policía local, quién tenía una personalidad malhumorada. Dirigiéndose al rabino, le preguntó." ¿Adonde vas"?, a lo que el rabino contestó: "No lo sé...." El policía con cierto tono de enfado, le dice, "¿que quieres decir con no lo sé?." Durante veinte años has estado cruzando esta plaza para orar en el tabernáculo, y estás tratando de decirme que no sabes hacia donde vas?". El jefe de la policía estaba tan enojado, que sujetando con fuerza al rabino se lo llevó en volandas al calabozo. Cuando estaba empujándolo para introducirlo en la celda, el rabino dijo: Los ves, uno no lo sabe!
También tu tienes razón
Dos monjes paseaban tranquilamente por el jardin de un monasterio tibetano cuando de pronto, uno de ellos vió en el suelo un caracol deslizarse con su parsimonia habitual estando apunto de ser aplastado. Uno de los monjes agachándose, recogió el caracol y dijo a su compañero: "Mira, hemos estado a punto de matar este caracol,y este animal representa una vida y a través de ella, un destino que debe proseguir; este caracol debe sobreviviir y continuar su camino." Y delicadamente volvió a dejar el caracol entre la hierba.¡ "Inconsciente1", exclamó enfadado el otro monje, "salvando a este caracol, pones en peligo todas las lechugas que nuestro jardinero cultiva con tanto cuidado.Por salvarlo, lo que haces es destruir el trabajo de uno de nuestros hermanos.
Los dos monjes comenzaron a discutir bajo la atenta mirada de otro monje que por allí pasaba. Como no llegaban a ponerse de acuerdo, el primer monje propuso, "vamos a contarle este caso al abad ; él es lo bastante sabio para decidir quièn de los dos tiene razón".
El abad, conocedor de la naturaleza humana
Se dirigieron al lugar donde se encontraba el abad, seguidos siempre por el tercer monje, quien se sentía muy intrigado por el caso. El primer monje contó que había salvado un caracol y por tanto había preservado una vida sagrada, que contenía miles de existencias futuras. El superior escuchó con atención, movió la cabeza y dijo: "Has hecho lo que convenía hacer: has hecho bien". El segundo monje reaccionó impulsivamente, "¿cómo?.salvar a un caracol devorador de ensaladas y devastador de verduras es bueno? Al contrario, había que haber aplastado al caracol y proteger así el huerto, gracias al cual tenemos todos los días buenos alimentos para comer."
El abad, de nuevo escuchó conn atención y dijo: " Es verdad, es lo que convendría haber hecho. Tienes razón".
El tercer monje que había permanecido en silencio hasta entonces, dijo con extrañeza:"¡ Pero si sus puntos de vista son diametralmente opuestos! ¿cómo pueden tener razón los dos?" El superior miró fijamente al tercer monje y dijo: "Es verdad, también tu tienes razón"
El renunciante y el diamante
Hay lecciones e historias que nos hacen dar cuenta de estados de ánimo o de actitudes que pueden ser beneficiosas e incluso liberadoras en nuestras vidas. Creo que ésta puede ser una de ellas. Claro ejemplo de desprendimiento, renuncia y amor, lo tenemos en Vicente Ferrer. Esta historia la dedico en su memoria y a mi extraordinaria vivencia con él.
Un sanyasin o renunciante había llegado a las afueras de una aldea y después de un largo día, de tanto caminar, se tumbó bajo un árbol dispuesto a pasar la noche. De pronto, un habitante de la aldea, de forma inesperada se acercó corriendo hasta él, diciéndole: "¡ La piedra! ¡La piedra1 ¡Dame la piedra preciosa1
El sanyasin asombrado le pregunta: ¿qué piedra?
"La otra noche se me apareció en sueños el Señor Siva, - dijo el aldeano - y me aseguró que si venía al anochecer a las afueras de la aldea, encontraría a un renunciante que me daría una piedra preciosa y que me haría rico para siempre."
El sanyasin pacientemente empezó a rebuscar en su bolsa y de ella extrajo una piedra. "Probablemente, se refería a ésta", dijo mientras entregaba la piedra al nervioso aldeano. "La encontré en un sendera del bosque hace unos días. Por supuesto que puedes quedarte con ella".
El hombre se quedó mirando a la piedra extasiado. ¡Era un diamante! Tal vez de los más grandes y valiosos del mundo, puesto que tenía el tamaño de la mano de un hombre.
Tomó el diamante y con gran regocijo se marchó. Al llegar a su casa empezó a hacer planes de futuro con el valor que el diamante tenía. A media noche, incapaz de dormir, empezó a dar vueltas en su cama, pensando y reflexionando.
Al día siguiente, nada más amanecer, corrió presuroso a despertar al sanyasin y le dijo:
"Dame la riqueza que te permite desprenderte con tanta facilidad de este diamante".